El verano en España atrae a miles de turistas a sus costas, pero también trae riesgos como las picaduras de medusas. Aunque la mayoría de las picaduras no son graves, es fundamental saber cómo actuar.
Las picaduras de medusas causan dolor y picor inmediato, junto con enrojecimiento e inflamación. Para tratar una picadura, se recomienda limpiar la zona con agua salada y evitar el uso de agua dulce. Esto previene que las células urticantes exploten y liberen más veneno.
Es crucial avisar al socorrista más cercano y, si hay tentáculos adheridos, retirarlos con pinzas. Aplicar frío en la zona afectada puede ayudar a reducir el dolor y la inflamación. Además, es importante evitar la exposición al sol y no rascarse.
En el caso de la carabela portuguesa, una medusa peligrosa, se deben seguir pasos adicionales. Esta medusa puede causar reacciones severas, por lo que es vital buscar atención médica si se presenta dolor intenso o síntomas graves.
La prevención y el conocimiento son claves para disfrutar de un verano seguro en las playas españolas.
Imagen: infobae