Un grupo de científicos chinos afirma haber desarrollado una tecnología de camuflaje de plasma que puede hacer que los cazas furtivos chinos sean invisibles a los radares. Esta innovación utiliza plasma cargado con energía para dispersar las señales de los radares, lo que permite que los aviones desaparezcan de la pantalla de los radares. A diferencia de los aviones furtivos convencionales, esta tecnología de plasma se puede adaptar a aviones con diferentes diseños, lo que evita comprometer la aerodinámica del vehículo. Los investigadores han desarrollado dos tipos de dispositivos furtivos de plasma: uno que recubre las zonas sensibles ante los radares con un isótopo radioactivo para crear una película de plasma densa, y otro que ioniza el medio gaseoso alrededor del avión para crear una cortina de plasma. Esta tecnología también puede servir como escudo contra armas de microondas. Aunque existen desafíos técnicos, China está explorando cómo utilizar esta tecnología en otros sectores militares, como ocultar satélites militares o plataformas de lanzamiento de armas. Se espera que esta tecnología se implemente en China en un futuro cercano, lo que podría cambiar el curso de un conflicto bélico.
Imagen: Caza chino Chengdu J-20, N509FZ, CC BY-SA 4.0, via Wikimedia Commons