En unas pocas horas, C.C. Wei, actual director general de TSMC, asumirá la presidencia de la compañía. Este cambio se produce en un momento delicado, con Mark Liu dejando el cargo con la confianza en la gestión de Wei durante los últimos seis años. Bajo su dirección, TSMC se ha consolidado como el mayor fabricante de semiconductores del mundo, con una cuota de mercado del 60%, muy por delante de Intel y Samsung.
El principal desafío para Wei no serán sus competidores, sino la geopolítica. Hasta ahora, Liu ha sido la cara pública de TSMC, manejando las relaciones con los Gobiernos y los desafíos políticos. Wei, por su parte, se ha centrado en la estrategia de negocio y el crecimiento de la compañía. A partir de mañana, tendrá que asumir también el rol de representante público de TSMC.
La situación geopolítica es especialmente tensa debido a la posibilidad de una invasión de Taiwán por parte del Gobierno de Xi Jinping. Mark Liu abordó este tema en 2022, destacando que una guerra sería perjudicial para todos. TSMC ha tomado medidas para mitigar este riesgo, expandiéndose internacionalmente con plantas en China, EEUU, Alemania y Japón.
A pesar de esta expansión, el Gobierno de Taiwán insiste en que TSMC debe seguir fortaleciendo su infraestructura dentro de la isla. La empresa debe equilibrar su crecimiento internacional con la protección de su tecnología puntera en Taiwán.
Imagen: TSMC
