La empresa Biomason ha desarrollado BioBasedTiles, baldosas de base biológica que se fabrican con la ayuda de bacterias. Estas baldosas son un 20% más ligeras, tres veces más resistentes y emiten un 95% menos de CO2 que el hormigón tradicional. La compañía ha aprendido de la naturaleza, estudiando cómo se crea el coral, para desarrollar este material sostenible. Además, Biomason también ha creado otros productos como CornWall, elaborado a partir de residuos de maíz, y WasteBasedBrick, que recicla residuos para convertirlos en bloques. Estos nuevos materiales están siendo utilizados en construcciones reales, como el patio exterior de un edificio en San Francisco y los suelos de un centro de educación e investigación en Dinamarca. Con su innovador enfoque, Biomason busca reducir las emisiones de carbono de la industria del hormigón y ofrecer alternativas más sostenibles.
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