Desde hace años, Apple se esfuerza por diversificar su cadena de suministro para depender menos de China. La compañía de Cupertino ha conseguido que muchos de sus productos provengan de instalaciones situadas en Estados Unidos, India y Vietnam. Sin embargo, esta misión no está siendo una tarea fácil. Los desafíos para la firma se acumulan sin tregua.
Las instalaciones del sudeste asiático que se encargan de fabricar y ensamblar productos como los AirPods, el iPad y el Apple Watch necesitan cubrir miles de puestos de trabajo. Según Rest of World, no hay suficientes personas dispuestas a trabajar durante largas jornadas en las líneas de producción, lo que está llevando a las compañías a tomar medidas.
Vietnam se ha convertido en uno de los destinos favoritos de los proveedores de grandes tecnológicas como Apple por diversas razones. Este país ha facilitado acceso a una mano de obra amplia y mucho más económica que la de China. Sin embargo, el salario mínimo mensual ha crecido más de un 10% en la última década, alcanzando los 4,96 millones de dong (182 euros) en la zona mejor paga.
Los trabajadores en Vietnam suelen realizar huelgas para protestar porque el dinero que perciben no les alcanza para llegar a fin de mes. En este contexto, algunos proveedores de Apple han puesto en marcha campañas en las redes sociales para que las personas puedan ganar dinero al referir nuevos empleados. Luxshare, una de las firmas que ensambla AirPods, ofrece recompensas de entre 1 millón de dong (37 euros) y 1,8 millones de dong (66 euros) por cada nuevo trabajador referido.
Además, los proveedores están teniendo dificultades para atraer talento cualificado que hable mandarín, un requisito importante para firmas como Pegatron. Por otro lado, un reciente incendio en India ha complicado los planes de producción de Apple en esa región, abriendo la posibilidad de pedir suministros a China.
Imagen: Apple
