Un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de Oregon confirma que agregar agua antes de moler los granos de café reduce la electricidad estática y mejora el sabor. Esta técnica, conocida como la ‘gota de Ross’, evita que el café molido se esparza y se pegue al molinillo. Además, elimina los microgrumos que afectan el rendimiento de extracción y el sabor del café. El estudio encontró que agregar agua aumenta el rendimiento de extracción en un 10%. Aunque no necesariamente se traduce en una diferencia tangible en el sabor, la técnica mejora la limpieza del proceso de preparación. Sin embargo, el beneficio de preparación solo se produce con el espresso y el café filtrado. Expertos en café sugieren comenzar con una sola gota de agua y ajustar según el gusto personal. Aunque el estudio necesita más pruebas con diferentes modelos de molinillos, los beneficios de agregar agua antes de moler los granos son plausibles y podrían conducir al desarrollo de tecnologías mejoradas en el futuro.
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