A pesar de los recientes problemas de reputación, Boeing cerró el 2023 con pedidos récord. Sin embargo, un incidente con un 737 Max de Alaska Airlines ha vuelto a poner en entredicho la confianza en el fabricante. La Administración Federal de Aviación está llevando a cabo una investigación minuciosa. Además de enfrentarse a las autoridades, Boeing también debe lidiar con sus clientes y problemas de reputación. Los ejecutivos de aerolíneas han pedido a Boeing que se enfoque en producir los mejores aviones en lugar de centrarse en la rentabilidad. La escisión de Spirit AeroSystems, una subsidiaria de Boeing durante 78 años, ha sido señalada como un gran error. Spirit fabrica aproximadamente el 70% de la estructura de la familia 737, incluido el fuselaje y las alas. Boeing ahora se enfrenta a problemas de calidad en algunas piezas suministradas por Spirit, como el tapón de puerta del Boeing 737 Max 9 de Alaska Airlines.
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