La reciente rebelión de ligas deportivas como el pádel, el golf y el fútbol demuestra que el dinero es el factor clave en estos conflictos. Al igual que ocurrió en la Fórmula 1, donde Bernie Ecclestone desafió a la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), los equipos de fútbol liderados por Florentino Pérez se enfrentan a la FIFA y la UEFA en la guerra por el control de los derechos comerciales y la distribución de ingresos. Sin embargo, subestimar al poder federativo puede ser un error, como demostró la historia de la Fórmula 1. Ecclestone logró un acuerdo con la FIA, donde él se encargaba de la explotación comercial y la FIA mantenía el poder reglamentario y deportivo. Años después, Ecclestone aprovechó las elecciones a la presidencia de la FIA para colocar a Max Mosley, su aliado, en el cargo y asegurar su control sobre el negocio de la Fórmula 1. Mosley eliminó competiciones que podrían afectar los ingresos de la Fórmula 1 y vendió los derechos del deporte a Ecclestone por 100 años. Este ejemplo muestra cómo el poder del dinero puede influir en el resultado de una guerra entre el poder federativo y el poder comercial de los equipos. Florentino Pérez y los equipos rebeldes deben tener en cuenta estas lecciones si quieren tener éxito en su lucha contra la FIFA y la UEFA. No subestimar al enemigo y buscar alianzas estratégicas pueden ser clave para lograr sus objetivos.
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