El ciclo solar 25 está acercándose a su pico y eso quiere decir que nuestra estrella tiene sobre sí más ojos que nunca. Las observaciones del Sol realizadas durante las últimas semanas nos han permitido ver inmensos agujeros en su corona, la parte más exterior de la estrella. Estos agujeros son regiones en la corona en la que los campos magnéticos presentes en el exterior del Sol se atenúan o desaparecen, permitiendo que los vientos solares emanen hacia el espacio exterior. Estos agujeros están vinculados a tormentas solares, por lo que los expertos advierten de un aumento en la probabilidad de que suframos tormentas solares en los próximos días. El ciclo solar 25 está siendo más intenso de lo esperado y su pico se ha adelantado, lo que ha generado preocupación por los efectos de una gran tormenta solar. Las agencias espaciales y meteorológicas están monitorizando la actividad solar con atención y cuentan con observatorios como el SOHO y el SDO para avisar en tiempo real de cualquier cambio observable. Estos datos ayudan a generar previsiones de la meteorología espacial y comprender posibles riesgos. Es importante estar al tanto de la actividad solar para minimizar los perjuicios causados por las tormentas solares y otros fenómenos relacionados.