El comercio de Estados Unidos ha respirado aliviado tras el principio de acuerdo que desconvoca la huelga de estibadores en los puertos de la costa este. Este acuerdo, alcanzado en la madrugada, permite la reanudación de las actividades de carga y descarga, que estaban en riesgo de paralizarse, generando grandes pérdidas económicas.
La Asociación Internacional de Estibadores (ILA), que representa a unos 45.000 trabajadores, ha aceptado un incremento salarial del 62% en los próximos seis años. Este aumento es inferior al 77% que inicialmente reclamaban, pero es una mejora respecto a la oferta anterior de un 50% por parte de los operadores portuarios.
El nuevo acuerdo extiende el Contrato Marco hasta el 15 de enero de 2025, permitiendo que los estibadores vuelvan a sus puestos de trabajo. Sin embargo, este acuerdo es solo una tregua, ya que aún debe ser ratificado por las bases de ILA. Si los estibadores rechazan el acuerdo, podrían reactivarse las huelgas, como ha sucedido en otras ocasiones.
La Casa Blanca ha mediado en el conflicto, haciendo llamados a la negociación y a la normalización de las actividades portuarias. El presidente Biden ha expresado su satisfacción con el acuerdo, destacando la importancia de la negociación colectiva y la justicia para los trabajadores.
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