Desintegración y radiactividad son conceptos fundamentales en la física moderna. La radiactividad es un proceso natural donde un núcleo atómico inestable pierde energía para alcanzar un estado más estable, emitiendo radiación. En el núcleo, los protones, que tienen carga positiva, son estabilizados por los neutrones, que son neutros. Esta interacción es crucial para la estabilidad del átomo.
Los átomos inestables, a diferencia de los estables, necesitan desprenderse de energía para alcanzar un estado menos energético. Este proceso se lleva a cabo a través de cuatro mecanismos: radiación alfa, beta, beta inversa y gamma. Cada uno de estos mecanismos permite al átomo modificar su estructura y alcanzar estabilidad.
El CERN, conocido por sus investigaciones en física de partículas, ha desarrollado el experimento NA62, que estudia la desintegración de los kaones. Estas partículas subatómicas, compuestas por un quark extraño y un antiquark, tienen una vida extremadamente corta y se desintegran rápidamente. El experimento ha medido una tasa de desintegración de kaones que es significativamente más alta de lo que predice el Modelo Estándar de la física de partículas.
Esta discrepancia es emocionante para los físicos, ya que podría indicar la existencia de nueva física más allá del Modelo Estándar. La profesora Cristina Lazzeroni ha destacado que esta desintegración es sensible a varios modelos teóricos que podrían explicar fenómenos aún no comprendidos. El CERN sigue recopilando datos, y los resultados futuros podrían revolucionar nuestra comprensión de la física.
Imagen: CERN