En la carrera por los coches eléctricos, la autonomía y la duración de las baterías no son los únicos factores a considerar. El software se ha convertido en un elemento crucial para el éxito de los nuevos vehículos. Sin embargo, marcas como Toyota y Volkswagen se están quedando atrás en este aspecto, según un informe de Financial Times.
La consultora Gartner ha clasificado a los fabricantes de automóviles, y solo Ford, GM y BMW se encuentran entre los 10 primeros. En cambio, empresas chinas como Nio, Xpeng y BYD, junto a Tesla, dominan el sector. A pesar de los esfuerzos de Volkswagen y Toyota, su desarrollo de software no ha logrado igualar a sus competidores.
Anders Bells, de Volvo Cars, ha señalado que la transición hacia un software avanzado es complicada y requiere cambios tanto en mentalidad como en tecnología. Volvo ha presentado su nuevo modelo EX90, que incluye software avanzado, pero también ha enfrentado problemas de lanzamiento.
Por otro lado, Renault ha fijado un objetivo ambicioso: que el 40% de sus beneficios provengan del software para 2030. Sin embargo, ha decidido no sacar a bolsa su unidad de software, Ampere. Para mejorar su tecnología, Volkswagen ha firmado un acuerdo con Rivian por 5.000 millones de dólares.
Toyota, por su parte, ha reportado pérdidas significativas en su unidad de software, Woven, y debe resolver estos problemas para no perder cuota de mercado. Los analistas advierten que, si no se adaptan, dependerán de empresas tecnológicas como Apple y Google.
A pesar de contar con recursos, los grandes fabricantes no han utilizado su potencial de manera eficiente. La monetización del software es un aspecto atractivo, ya que podría generar ingresos significativos en el futuro. Según Accenture, los servicios digitales podrían alcanzar los 3,5 billones de dólares en 2040.
En conclusión, aunque el desarrollo de software para coches eléctricos presenta desafíos, los beneficios a largo plazo podrían ser significativos. La clave está en la adaptación y en la inversión en tecnología adecuada.
Imagen: Business Insider