Jenna Ortega, la protagonista de la serie de Netflix ‘Miércoles’, ha reflexionado sobre sus controvertidas declaraciones respecto a los guionistas del programa. En una reciente entrevista con Vanity Fair, Ortega admitió que sus palabras fueron inapropiadas y que podría haber manejado la situación de manera más amable.
La actriz se había enfrentado a una gran controversia tras expresar que necesitaba «cantárselas» a los guionistas, ya que sentía que sus escritos no se alineaban con su personaje. Esta situación la llevó a ser considerada como una de las actrices más tóxicas de Hollywood, lo que la afectó profundamente.
Ortega comentó que durante meses su imagen estuvo en todos los medios, y sus palabras fueron analizadas y criticadas. Reconoció que la magnificación de sus comentarios la hizo sentir como una caricatura de sí misma. A pesar de la presión, aprendió que no siempre se puede agradar a todos y que eso está bien.
La actriz también reflexionó sobre su propia percepción y cómo lidiar con la atención mediática. Aceptó que, aunque su intención no era ofender, la forma en que se expresó tuvo repercusiones. Ahora, con una nueva perspectiva, Ortega se muestra más consciente de sus palabras y de su impacto en el equipo de trabajo.
En resumen, Jenna Ortega ha aprendido una valiosa lección sobre la comunicación y la importancia de ser respetuosa con quienes colaboran en la creación de su arte. Su experiencia resalta la presión que enfrentan los actores en la industria del entretenimiento y cómo las palabras pueden tener un peso significativo.
Imagen: Espinof
