El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ha condenado al Sistema Andaluz de Salud (SAS) a indemnizar con 109.000 euros a la familia de un hombre que falleció debido a una asistencia sanitaria de urgencias negligente. Este caso, que ha sido informado por la Asociación El Defensor del Paciente, ocurrió el 20 de agosto de 2018 en Jaén.
El paciente, un hombre de 70 años, sufrió una hemorragia abundante por la rotura de una variz. Su esposa solicitó una ambulancia desde su domicilio, pero esta tardó más de una hora en llegar y no contaba con médico. Posteriormente, fue trasladado al Hospital Universitario de Jaén, situado a solo 200 metros de su casa, tres horas después de la primera llamada, momento en el que ya no se pudo hacer nada por salvar su vida.
La familia del paciente argumentó que el servicio de urgencias actuó de manera negligente al no seguir el protocolo establecido. A pesar de las múltiples llamadas de auxilio, no se asignó una Unidad Móvil de Emergencias que estaba disponible desde el principio. En su lugar, llegó una ambulancia con un conductor no sanitario, lo que contribuyó al retraso en la atención.
Tras una primera resolución judicial que reconocía parcialmente los hechos y establecía una indemnización de 30.000 euros, la familia apeló. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ha estimado el recurso, aunque parcialmente, señalando que el retraso fue inexcusable a partir de la segunda llamada, donde se evidenció un agravamiento de la situación.
La presidenta de la Asociación El Defensor del Paciente, Carmen Flores, ha subrayado la importancia de que los servicios de ambulancias de urgencias estén adecuadamente dotados y que se cumplan los protocolos para evitar muertes en situaciones críticas.
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