La relatividad general y la mecánica cuántica son dos teorías fundamentales en la física moderna, pero hasta ahora han sido incompatibles. Un equipo de físicos de la Universidad de Viena, liderado por el profesor Philip Walther, ha realizado un experimento que podría cambiar esto. Utilizando un interferómetro óptico de Sagnac, han medido el efecto de la rotación de la Tierra sobre pares de fotones entrelazados, logrando una precisión mil veces mayor que la de otros dispositivos similares.
El entrelazamiento cuántico es un fenómeno en el que el estado de dos o más partículas está interconectado, independientemente de la distancia que las separe. Este experimento ha demostrado la interacción entre los sistemas de referencia en rotación y el entrelazamiento cuántico con una precisión sin precedentes. Según Walther, este avance podría mejorar la sensibilidad de los sensores cuánticos y abrir la puerta a futuros experimentos que prueben el comportamiento del entrelazamiento cuántico en el continuo espacio-tiempo.