El verano es una excelente época para plantar flores que crecen rápidamente y embellecen cualquier jardín. Estas flores no solo son fáciles de cultivar, sino que también requieren poco mantenimiento. A continuación, se presentan algunas de las mejores opciones para plantar en esta temporada.
Capuchina: Conocida también como Tropaeolum majus, esta flor es comestible y requiere mucho sol. Sus flores anaranjadas son perfectas para ensaladas.
Alelí: La Matthiola es una planta bianual con flores de colores variados. Prefiere el sol para una floración abundante.
Caléndula: Esta flor tiene propiedades calmantes y es ideal para productos cosméticos. Ama el sol, aunque también soporta la semisombra.
Maravilla: La Mirabilis jalapa, originaria de Argentina, necesita riego generoso y tiene aplicaciones medicinales.
Espuela de caballero: El Delphinum es una planta esbelta que se adapta a climas frescos y templados, con temperaturas entre 15 y 24 grados.
Paniculata: La Gypsophila paniculata es ideal para bodas y bautizos. Necesita suelos secos y mucha luz solar directa.
Nigella: Esta planta mediterránea necesita mucho sol y temperaturas cálidas. No se recomienda trasplantarla.
Campanillas silvestres: La Campanula Catharina florece en primavera y se mantiene hasta el verano. Es ideal para semisombra y su sustrato debe estar ligeramente húmedo.
Aquilegia: Esta flor elegante prefiere ambientes húmedos sin acumulación de agua y zonas con sombra.