En la región de Apulia, al sur de Italia, se celebrará la próxima cumbre del G7 del 13 al 15 de junio de 2024. Sin embargo, esta zona enfrenta un preocupante aumento de la violencia mafiosa. Según el informe semestral del Ministerio del Interior de Italia, tres grupos criminales de tipo mafioso, ramificaciones del sindicato criminal Sacra Corona, están detrás de este repunte de la criminalidad. Estos grupos, centrados en torno a la ciudad de Foggia, han estado involucrados en conflictos entre clanes y fricciones internas, lo que ha llevado a un aumento de los asesinatos y mutilaciones.
La DIGOS, la principal unidad antiterrorista y antimafia de Italia, ha señalado que estos grupos operan principalmente en Italia y los Balcanes, a diferencia de otras mafias italianas con presencia internacional. La violencia ha incluido ataques a plena luz del día y robos de coches a mano armada, especialmente en las ciudades costeras de Bari y Brindisi, cerca del lugar de la cumbre.
El Ministerio del Interior ha sugerido desplegar al Ejército para recuperar el control de la región. Además, se han disuelto varios ayuntamientos locales debido a la infiltración de la mafia. La seguridad de la cumbre estará a cargo de DIGOS, que ha implementado una «zona roja» de 10 kilómetros alrededor del complejo turístico de Borgo Egnazia, sede de la cumbre, y una «zona amarilla» de 30 kilómetros que será estrictamente patrullada.
Más de 5.000 soldados han sido desplegados en la región, y se espera la llegada de un portaaviones de Estados Unidos para reforzar la seguridad. La política de fronteras abiertas de Schengen se ha suspendido temporalmente para permitir un control más estricto de los pasaportes. Las autoridades también están preocupadas por las posibles protestas durante la cumbre, recordando los violentos enfrentamientos de la cumbre del G8 en 2001.
El jefe de la Policía de Apulia, Vittorio Pisani, ha declarado que, aunque los líderes mundiales estarán bien protegidos, es crucial garantizar la seguridad de las aproximadamente 10.000 personas que se desplazarán entre Bari y Brindisi durante la cumbre. La Policía debe también proteger otras zonas de la provincia para evitar que la delincuencia se aproveche de la situación.
Imagen: CNN
