Según Reclaim.ai, el tiempo que los trabajadores de oficina pasan en reuniones se ha reducido a 14,8 horas semanales en 2024, frente a las 21,5 horas semanales de 2021. Esto supone un descenso del 31%, según los datos de 1.300 trabajadores encuestados.
El cambio puede explicarse en parte por el covid. Durante la pandemia, hubo un aumento de las reuniones individuales debido al trabajo desde casa, pero posteriormente muchas personas se dieron cuenta de la necesidad de reducir la cantidad de reuniones.
Aunque la reducción es significativa, los trabajadores aún asisten a una media de 17,1 reuniones a la semana, con una duración promedio de 51,9 minutos. Las reuniones de equipo son las más frecuentes, con una media de 6,7 a la semana.
La gestión de la agenda también puede afectar la productividad, ya que los trabajadores dedican unas tres horas semanales a reservar y reprogramar reuniones. Además, muchos trabajadores cancelan o se saltan reuniones debido a conflictos con otras reuniones o para centrarse en tareas más importantes.
A pesar de las quejas sobre las reuniones, son consideradas esenciales por su valor en la conexión y el aprendizaje. Las reuniones brindan la oportunidad de resolver problemas y aprender a lidiar con desacuerdos, especialmente para los trabajadores más jóvenes.
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