Canarias se ha levantado en contra del turismo descontrolado, con una manifestación masiva que ha reunido a decenas de miles de personas en las diferentes islas del archipiélago. Bajo el lema “Canarias tiene un límite”, los manifestantes expresaron su rechazo a un modelo turístico que consideran “depredador” y que está sobrecargando las islas.
Entre las demandas de los manifestantes se encuentra una moratoria para detener la apertura de nuevos alojamientos turísticos y la implementación de una ecotasa. La presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, ha mostrado su apoyo a esta última medida, proponiendo cobrar a los turistas que deseen visitar espacios naturales. Según Dávila, “Tenerife no puede ser un parque temático”.
La idea de cobrar a los visitantes no es nueva, y Dávila no es la única que ha hablado sobre ello. Hace unos meses, el vicepresidente del Cabildo también se mostró a favor de implementar una tasa para acceder al monte Teide, argumentando que ya se hace en otras zonas turísticas importantes. Sin embargo, destacó la importancia de mejorar el servicio a los turistas junto con la implementación de la tasa.
Dávila reconoce que las manifestaciones del fin de semana marcan un punto de inflexión en Tenerife y que es necesario revisar el modelo turístico para garantizar los beneficios para la sociedad y la calidad de vida de los residentes. Para lograr esto, propone estudiar medidas jurídicas y fiscales para establecer límites al turismo.
La clave, según Dávila, es lograr un turismo que sea capaz de regenerar y partir de la premisa de que “Tenerife no es un parque temático”. Por eso, están considerando la posibilidad de que los turistas paguen por entrar en los parques naturales, no con el objetivo de recaudar dinero, sino como una cuestión de respeto.
Imagen: Troels Fiig (Flickr)
