Una investigación liderada desde el Centro Nacional de Epidemiología revela que las personas expuestas a una mayor densidad del tráfico cerca de su hogar tienen más problemas de salud física y mental, peor salud percibida y mayor riesgo de enfermedades crónicas. Además, se vincula con un envejecimiento más rápido. El estudio, realizado con datos de 3.000 adultos mayores de 60 años, concluye que vivir cerca de una gasolinera también aumenta los riesgos para la salud en el envejecimiento. Reducir la contaminación asociada al tráfico urbano debería ser una prioridad en salud pública.
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