El cronotrabajo propone adaptar la jornada laboral al ritmo circadiano natural de cada persona. Conocer tu cronotipo te permitirá sincronizar tu horario de trabajo con tu reloj interno para mejorar la productividad. El trabajo asíncrono y la flexibilidad del trabajo remoto son clave para aprovechar al máximo tu potencial. Si eres madrugador, concentra las tareas más exigentes por la mañana. Si eres noctámbulo, programa tus actividades más importantes para la tarde. Las personas con cronotipo intermedio deben planificar su jornada de forma más dispersa, evitando la procrastinación.
Imagen: Pexels (Andrea Piacquadio)