El antiguo restaurante Los Tres Molinos, ubicado en Esplugues de Llobregat, Barcelona, ha sido reconvertido en una tienda de Lidl. El supermercado conservó la fachada del restaurante, que estaba protegida por el Ayuntamiento, y se instaló en su interior con mínimas modificaciones. El edificio histórico, conocido por sus tres molinos de estilo manchego, fue construido en la década de 1950 y se especializó en banquetes familiares desde 1961. Sin embargo, en 2011 cesó su actividad y ahora alberga una tienda de Lidl de más de 1.600 metros cuadrados. El supermercado cuenta con 150 plazas de aparcamiento y una cincuentena de puestos de trabajo. A pesar de la transformación, el edificio no ha borrado su historia como restaurante emblemático de la zona. Los Tres Molinos es un ejemplo de cómo antiguas estructuras, como sucursales bancarias o restaurantes, están siendo reutilizadas por el sector de la alimentación. Esta tendencia se ha visto en otras ciudades, como Madrid, donde Lidl ha inaugurado una tienda en un antiguo restaurante. La reutilización de estos espacios permite conservar la arquitectura y la historia de los edificios, al mismo tiempo que se adaptan a las necesidades actuales. En el caso de Los Tres Molinos, Lidl invirtió 15 millones de euros en la transformación del restaurante en una tienda, lo que demuestra el interés de la cadena de supermercados en este tipo de proyectos. La historia de Los Tres Molinos es un ejemplo de cómo la reutilización de antiguos edificios puede dar una nueva vida a espacios emblemáticos y contribuir al desarrollo urbano y económico de una zona.
Imagen: Joana Costa