En la década de los 80, Japón construyó el Aeropuerto Internacional de Kansai en dos islas artificiales en la Bahía de Osaka para evitar la contaminación acústica. Sin embargo, estas islas se están hundiendo más rápido de lo esperado y se estima que el aeropuerto podría estar sumergido en 30 años. A pesar de los desafíos, el aeropuerto ha sobrevivido a terremotos y tifones. Esta obra de ingeniería, que ha costado miles de millones de dólares, ha sido un logro impresionante, pero la naturaleza siempre prevalece.
Imagen: Motorpasión