El cubo de Rubik, creado por Ernő Rubik en los años 70, se ha convertido en un icono global. Aunque fue ideado como una herramienta didáctica, su complejidad y desafío lo han llevado a ser uno de los rompecabezas más populares del mundo. Rubik buscaba un objeto móvil y manipulable que enseñara nociones de diseño tridimensional. El cubo de Rubik ha trascendido su propósito original y ha ganado fama internacional. Desde su lanzamiento en 1977, ha vendido más de 400 millones de unidades. Además, ha aparecido en películas, series de televisión y ha sido objeto de competiciones de speedcubing. Aunque solo el 1% de las personas ha logrado resolver el cubo sin ayuda, su fama y popularidad continúan creciendo.
Imagen: Kenny Eliason (Unsplash)